Meterse en la cama con sábanas recién lavadas, manejar con el vidrio bajo en una mañana de verano y ver a una pareja de viejitos de la mano son algunos de los pequeños placeres de la vida que nos hacen sentir mejor.
Así lo asegura un nuevo estudio publicado por la empresa francesa The Three Barrels, en la que 3 mil personas respondieron qué cosas de la vida cotidiana les dibujan una sonrisa en el alma.
Otras pueden ser:
Nadar en el mar., Despertarse en un día soleado.,Tomar solo,Ser sorprendido con flores o bombones., Recibir un mensaje tierno de alguien que amamos., Abrazos.
Pequeños gestos de amigos y familia pueden hacer maravillas cuando estamos con los espíritus caídos.....
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